Revista MU
Cuando la sociedad ensalza a un personaje hasta encumbrarlo en un “dios-deportista”, éste merece ser presentado con el lenguaje que los antiguos helenos practicaban a sus dioses; el movimiento en potencia.
Y así como si del “discóbolo” de Mirón se tratara, el gesto no acompaña a la acción, puesto que un dios no padece el cansancio de los mortales, y un esfuerzo no debe reflejar molestias. Así queda reflejado en el “tenistóbolo”, dios-deportista contemporáneo, que despliega toda su fuerza y su potencia con el gesto sereno de los dioses del Olimpo.
Pero la serie fotogramas no trata de proponer respuestas, se limita a recoger la instantánea de las distintas situaciones en la que aparecen los personajes, como si un momento de la proyección de la vida se detuviera, en un escenario neutro, uniforme, que nos invita a reflexionar sobre las distintas situaciones que nos acompañan, y que subrayan el verdadero protagonista, el sujeto, el sujeto y sus circunstancias, su existencia y sus propias preocupaciones. Fotogramas son momentos fotográficos, donde con un lenguaje visual sencillo se instrumentaliza una estética fotográfica de una manera pictórica, a través de una propuesta humanista, donde presenciamos como meros espectadores imágenes sobredimensionadas de personajes anónimos y públicos como protagonistas de su propio film, a modo de cartel cinematográfico, donde la acción queda suspendida en un instante y se nos invita a reflexionar sobre la importancia de cualquier individuo.